Después de trabajar en eventos de todo tipo, desde convenciones en salones de cientos de personas, teatro, óperas, carreras deportivas, networkings, simposios, hasta bodas o bautizos. Además de documentarme a fondo y acompañar a otros fotógrafos, he reunido las mejores claves sobre el tema.
1.Captar la atmósfera: esto quiere decir hacer una foto en el que se vea la iluminación real. Si la mayor parte de la luz esta concentrada en un solo punto, haz lo que sea para no meter el flash. La luz de flash distrae la atención de los asistentes y destroza la iluminación ambiente, por lo que debes justificar muy bien su uso.

2. No Molestes: por muy importante que sea la foto el fotógrafo debe ser ágil para que no se note su presencia. La comunicación visual entre emisor (ponente) y receptor (público) es la clave en los eventos. Las emociones espontáneas dependen de ello.
3.Tú no eres el protagonista, por lo tanto no te subas al escenario y ni se te ocurra pasarte de un lado al otro del mismo. Tus fotos son lo único importante, pero eso no justifica que molestes a los espectadores.
4.Busca las emociones: Debes estar atento a la conversación, seguir el hilo y percibir cuando se va a producir una carcajada, por ejemplo. Este es uno de los puntos más importantes. Puedes hacer un reportaje con fotos correctas, o puedes hacer un reportaje memorable lleno de momentos únicos.

5.Rompe la quietud: los eventos con escenario pueden resultar en fotografías monótonas así que será muy necesario hacer fotos más dinámicas. Uno de las maneras para ello es desequilibrar la composición intencionadamente.


6.Usa reglas de composición avanzadas, como las líneas de concentración, crea líneas con las miradas que intensifican cualquier momentos por insignificante que sea. Como decía Robert Donisneau, “mi manera de componer es buscar el punto de vista que me gusta y esperar a que la gente ocupe el lugar que quiero”

7.Cuidado con “efecto villano”. cuando la iluminación produce una sombras tan oscuras que no puedes ver los ojos del ponente, esto provoca incertidumbre, misterio, poca transparencia.. Lo que se traduce en un efecto malévolo o villano, y viceversa.

8.Busca la luminosidad, si es un evento con poca luz, haz lo sea para iluminar el rostro. La luz se asocia al positivismo, el buen rollo… etc.
9.Refleja los colores reales. Aunque la iluminación de un evento sea dorada el ojo humano distingue entre la luz de una bombilla y la luz ambiente. El balance de blancos con carta gris, es la mejor opción.
En conclusión: Si te has gastado una pasta en material fotográfico, formación y marketing, es mejor que trates de dar lo mejor que tienes en cada proyecto y no hacer trabajos mediocres solo porque te lo pida una persona.
Una vez me dijo un amigo, no todo el mundo puede ser tu cliente.